Preguntas y Respuestas
P: Me dedico a la producción de pimiento, y utilizo la malla 10×16, pero el problema en la época de verano es la ventilación, ya que, utilizando este tipo de mallas, no es suficiente para el cuaje. También tenemos problemas con el trips, que es la plaga más agresiva en el cultivo, y con esta malla no tenemos un buen control ¿Qué tipo de malla me recomiendan para este cultivo?
R: La ventilación es muy importante y tiene una repercusión directa en la capacidad productiva del invernadero. Especialmente los trips tanto por su tamaño como por sus pequeñas dimensiones, son insectos de difícil control, pero este es muy importante porque son vectores de virus que ocasionan graves daños en los cultivos hortícolas en general.
La malla es conocida comercialmente como “malla antitrips” es la que tiene una densidad de 10×20 hilos por cm2. La recomendación sería aumentar la superficie de ventilación del invernadero, no sustituir la malla por una menos densa, entonces de esta manera podremos palear un poco los efectos que tiene la densidad de la malla en el microclima del invernadero, asegurarnos la hermeticidad de este, es decir asegurarnos de que no haya roturas o superficies que no estén cubiertas, ya sea por mallas o por plásticos, que pueden servir de vía de entrada de insectos.
En cuanto a la malla es muy importante tener en cuenta:
- Porosidad y homogeneidad: la porosidad debe estar determinada por el grosor del hilo, mientras que la homogeneidad por la correcta confección y diseño, con el objetivo que tenga el mismo tamaño del poro en toda la extensión de la malla, para que de esta manera no haya sitio con un determinado tamaño y en otros orificios que tengan un mayor tamaño y que puedan servir como vía de entrada de insectos. Lo que se busca es que los poros sean muy numerosos y homogéneos, de esta forma se garantiza la función de barrera física de la malla, impidiendo el paso de insectos, a la vez que permite la circulación optima del aire.
- Mantenimiento: es recomendable que se laven mensualmente con agua pulverizada a alta presión, de esta manera eliminamos la acumulación de polvos, porque lo que hace este es reducir la superficie efectiva de ventilación. Esta sería una medida sencilla que mejoraría notablemente la ventilación natural del invernadero.